Georgina Salmón, docente de la máxima casa de estudios e integrante del Colectivo 8M, informó que después de que los directores de las unidades académicas minimizaran los hechos, el número de denuncias se disparó, por lo que actualmente hay alrededor de 70 expedientes de denuncia por acoso sexual.
Posterior a que se revelara que existen 20 casos de acoso sexual en la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), el Colectivo 8M pidió a la institución educativa que actúe en consecuencia de los actos de docentes a alumnas de las diferentes unidades académicas.
La docente de la UAZ, además, enfatizó que el problema tiene dimensiones mayores y recordó que se registró el caso del suicidio de una alumna que sufría acoso; sin embargo, se reservó dar más información para no afectar a familiares, ni a la comunidad universitaria.
De igual manera, denunció que años atrás se había dado otro caso de acoso que también terminó en el suicidio de la afectada y que no tuvo consecuencias para el agresor.
“Eso ya es bastante grave. Existe el caso, tenemos el expediente ahí, además que quienes estudiamos humanidades hace muchos años recordamos que una compañera también se suicidó por un problema que tuvo con uno de los profesores”, abundó.
Acoso en unidades académicas
La integrante del Colectivo 8M denunció que “el acoso se está dando dentro de la Universidad, después de que salió una nota con el comentario tan irresponsable de los directores de las unidades académicas, nos llegaron muchísimas denuncias, de alumnas de Economía, de Artes, de Medicina y todas dicen lo mismo, el modus operandi es el mismo”.
Expuso que se denuncia a los mismos maestros, “son maestros que están cobijados, que dicen que son intocables que a ellos no les pueden hacer nada y que por esa razón continúan sus acciones”.
Asimismo, Georgina Salmón lamentó que la situación sea muy fuerte para la comunidad de mujeres estudiantes pues muchas de las jóvenes tienen que dejar de estudiar porque el acoso es excesivo, incluso no sólo por parte del docente, sino también por parte del personal administrativo que hostiga a las alumnas para que quiten las denuncias en contra de sus acosadores.
Explicó que otra de las acciones que se realizan es cambiar a las alumnas de turno o de salón; sin embargo, el problema persiste desde años atrás, pues el acoso está normalizado dentro de la Universidad.
“Hay maestros que dicen que así son ellos y que así se llevan ellos con las chicas, pero no te tienes que llevar así con ellas por ética, porque estás trabajando, entonces pedirle a la Rectoría que saquen los protocolos de actuación y exigimos que haya capacitaciones para que los profesores sepan [los límites] hasta dónde llegar con las alumnas”, sentenció.
Solicitan intervención de la Fiscalía
Por su parte, Mara Muñoz Galván, también integrante del Colectivo 8M, expuso que a raíz de la situación piden a la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE), actúe en acompañamiento a las víctimas de acoso y que las integrantes del colectivo apoyarán a las jóvenes que denuncien a iniciar un proceso jurídico.
Muñoz Galván recordó que a través del movimiento #MeToo se revelaron otros casos de acoso a diferentes gremios, como académicos, artísticos, periodísticos por lo que pidió que los mismos medios de comunicación no den voz excesiva a los agresores, “empoderar a personas que agreden la integridad de las mujeres amedrenta a quienes fueron sus víctimas y en ese sentido ellas se sienten desprotegidas porque se les están dando foros a los agresores”.
